Héctor Rodríguez de la Sotta
Héctor Rodríguez de la Sotta (1887-1967) fue un abogado y político. Se desempeñó como alcalde de la comuna de Pumanque, diputado por la 11.° circunscripción departamental de Curicó, Santa Cruz y departamento de Vichuquén, senador por la 5.° agrupación provincial de O'Higgins y provincia de Colchagua, y ministro de Agricultura en el gobierno del presidente Juan Esteban Montero Rodríguez.
Biografía
Nació el 20 de junio de 1887 en calle Mackenna, Osorno, provincia de Osorno, hijo del juez de letras Manuel Rodríguez Cisternas y Emilia de la Sotta.[1] Contrajo matrimonio con Carmela Olivares Rodríguez, con quien no tuvo hijos.[2] Olivares fue fundadora de la sección femenina del Partido Conservador.[3]
Se educó en el seminario y luego, en la Universidad de Concepción, donde se tituló como abogado cuando tenía 21 años. A temprana edad participó en una convención del Partido Conservador, en representación de los universitarios penquistas, y comenzó su militancia en esa tienda. Junto a un grupo de jóvenes conservadores, "obtuvo la incorporación al programa del partido de los principios de la encíclica Rerum novarum", del papa León XIII.[2]
Inició su carrera política siendo elegido municipal de la comuna de Pumanque, ejerciendo la posición de primer alcalde en los períodos 1921-1924 y 1924-1927.[4] Sin embargo, en este último, lo interrumpió como consecuencia de su elección como diputado por los departamentos de Curicó, Santa Cruz y departamento de Vichuquén, provincia de Curicó (11.° circunscripción departamental), cargo que ejerció entre 1926 y 1930.[2]
En 1925 fue presidente del Partido Conservador. Más adelante, en 1935, fue vocal de la junta ejecutiva de dicha tienda.[3] Fue ministro del presidente Juan Esteban Montero Rodríguez, en la cartera de Agricultura, la que ejerció entre el 8 de abril y 5 de junio de 1932. Ese mismo año fue candidato presidencial, sin ser elegido, obteniendo el 13,76% (47.207 votos). Entre 1933 y 1953 fue senador de la República, en representación de la 5.° agrupación provincial de O'Higgins y provincia de Colchagua. Posteriormente, fue consejero del Banco Central.[3]
Colaboró en El Diario Ilustrado, donde publicó columnas. Además, escribió los libros Inflación y carestía, Capitalismo o comunismo, Propiedad privada y capital.[3]
Falleció el 27 de agosto de 1967 en Santiago, provincia de Santiago, pocos meses después de la muerte de su esposa.[3]
Referencias
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